martes, 8 de febrero de 2011

Sobre las Configuraciones Familiares

     Desde los años 80, Bert Hellinger viene desarrollando su trabajo con Configuraciones Familiares (también traducido con el nombre de Constelaciones Familiares), brindando al mundo terapéutico, empresarial y educativo un conjunto de soluciones sistémicas para las problemáticas más diversas.
     La familia y sus relaciones vitales constituyen el punto de partida para descubrir el fondo de muchas de nuestras dolencias, sean de carácter físico, emocional o psíquico. La misma familia y el Orden en sus relaciones, se revelan también como la fuente de sanación.


     En estos tiempos en los que nuestra cultura tiende a desligarse cada vez más del Sistema Familiar, la experiencia práctica en el trabajo con Configuraciones Familiares, demuestra que no podemos desarrollarnos con plenitud y normalidad fuera de él. Pretender actuar creyendo que poseemos una personalidad autónoma es, en muchos sentidos, una ilusión; pues cada uno de nosotros nos hallamos unidos a nuestra familia a través de lazos que nos conectan con varias generaciones, habitualmente de forma inconsciente y mucho más intensa de lo que a primera vista cabría suponer.

     Bert Hellinger observó las dinámicas que conllevan identificaciones e implicaciones de una generación a la siguiente o siguientes. En el trabajo de Configuraciones Familiares, estas dinámicas e implicaciones salen a la luz. Al hacerlo, en la constelación, se pueden restablecer los Ordenes del Amor, dando a cada miembro de la familia un lugar de dignidad y respeto, apareciendo soluciones, a menudo sorprendentes, para el bienestar y alivio de todos los componentes del Sistema Familiar.

    En la web Constela.es puedes saber más sobre las configuraciones familiares y sistémicas y hay acceso gratuito a muchos videos que te pueden resultar interesantes.

El trabajo con Configuraciones Familiares

     El trabajo con Configuraciones Familiares, se constituye frecuentemente en un Instrumento para la Reconciliación, donde no hay ni buenos ni malos, tan solo personas unidas por unos lazos profundos de amor.


     El Trabajo con Configuraciones Familiares, se puede realizar en Talleres de Grupo, en Consulta Individual o con Movimientos Sistémicos:


I.- TALLERES DE GRUPO.


     En un taller de Configuraciones Familiares, trabajan todos los participantes en él. Este trabajo se puede hacer de tres maneras diferentes:


  1. Como Cliente: exponiendo un asunto que le preocupe o que quiera solucionar. La configuración se centra en las dinámicas de su Sistema Familiar.
  2. Como Representante: poniéndose al servicio del cliente representando a algún miembro de su familia.
  3. Como Participante: observando y ayudando a contener aquello que va ocurriendo durante el trascurso de la configuración.
     Cada facilitador tiene una manera personal y especial de coordinar este trabajo dependiendo de cada caso. Básicamente todos coinciden en unos pasos comunes:

     1.- La persona que hace su Configuración (cliente), tras exponer el asunto que le preocupa, elige representantes, entre los participantes al taller, para aquellas personas que integran su familia actual o de origen, incluyendo uno para sí mismo.
     2.- Los configura, es decir, los coloca en el espacio relacionándolos unos con otros. Lo único que tienen que hacer los representantes, es moverse o actuar de acuerdo a lo que perciban y/o sientan corporal y/o emocionalmente mientras están en el papel.
     3.- A partir de ahí el facilitador acompaña al cliente en el desarrollo de la configuración, orientándose a través de lo que expresan verbal, corporal y emocionalmente los representantes, ayudándose con frases sanadoras y/o con movimientos corporales, buscando una imagen de solución.
     4,- Se suele terminar incluyendo al cliente pidiéndole que ocupe su lugar para que participe de esa nueva imagen sanadora.

II.- CONSULTA INDIVIDUAL O DE PAREJA.


     No siempre es posible o necesario trabajar los asuntos en grupo. Se puede trabajar con Configuraciones Familiares de forma individualizada (cliente-constelador). Aquí el método es algo diferente y, al igual que en los Talleres de Grupo, varía según el facilitador y las necesidades de cada caso. Se pueden utilizar varias herramientas.
     Las más usadas son figuras o muñecos que se usan para configurar el Sistema Familiar. Aquí no podemos contar con la información de los representantes, por lo que el trabajo de percepción del cliente y del facilitador, son fundamentales.
    
III.- MOVIMIENTOS SISTÉMICOS.


     Los Movimientos Sistémicos son una serie de técnicas individuales y/o grupales (entrevistas, utilización de muñecos, uso de representantes, repetición de frases solucionadoras,…) que al ponerlas en práctica, muestran las dinámicas ocultas que a veces actúan en los conflictos y en las situaciones de desorden, dentro de las organizaciones y en las familias.


     Los Movimientos Sistémicos no buscan una solución terapéutica, aunque sus efectos suelen ser terapéuticos. Sólo muestran lo que está actuando y que no es visible o consciente para los implicados. Son una herramienta fundamental para la Pedagogía Sistémica (aplicación de los Órdenes del Amor a la Educación), las Configuraciones Organizacionales (aplicación al mundo laboral, empresarial y los equipos de trabajo), en las Instituciones en el campo social, en charlas y conferencias cuando se está mostrando el método con una mirada sistémica,...
     Son una herramienta muy útil en Educación porque permiten sacar a la luz asuntos que dificultan las relaciones dentro de los centros educativos, en el ámbito de lo estrictamente profesional, dejando al margen los asuntos personales y familiares.

¿A quién puede interesar este trabajo?

     A las personas que quieran encontrar una solución a asuntos problemáticos que les causen dificultades en su vida, ya sean de naturaleza relacional y/o familiar, como dificultades en la pareja, en las relaciones entre padres e hijos, entre los hermanos, hijos adoptados... o bien enfermedades físicas, emocionales, pérdidas y/o duelos, comportamientos difíciles, destructivos, adiccionesasuntos laborales, dificultades escolares, situaciones dolorosas que se repiten...

     A profesionales de la ayuda (educadores, maestros, trabajadores sociales, mediadores, orientadores, profesores…) y de la salud (médicos, enfermeros, terapeutas…) y también a jueces, fiscales y abogados, para tener otra comprensión de las situaciones que se les presentan cada día.

     A cualquier persona que quiera aumentar el conocimiento de sí mismo y ampliar la mirada respecto a la naturaleza sistémica de sus relaciones.